Las bebidas alcoholicas son zumos fermentados que contienen alcohol. En este grupo se incluyen vinos, cervezas, sidras, vermuts, anisados, cavas y champagnes, y licores y aguardientes. Se distinguen las bebidas fermentadas y las bebidas destiladas.
El porcentaje de alcohol en una bebida alcohólica se expresa en grados. Un litro de vino de 12º o 12% contiene 120 ml de alcohol. Un litro de whisky de 40º contiene 400 ml de alcohol.
El alcohol no es exactamente un alimento y consumirlo en exceso genera un problema para el equilibrio alimentario que interfiere en la absorción y metabolismo nutricional. Lo más deseable sería beber con mucha moderación, considerándose una recomendación saludable no sobrepasar los 40 ml (30 g) de alcohol diariamente, en el caso del hombre, reduciéndose esta cantidad a 27 ml para la mujer. Esto equivale a cuatro cañas de cerveza (1/2 litro) o a cuatro copas de vino (1/4 litro). El alcohol, consumido de forma moderada, parece que ejerce un efecto protector frente a las enfermedades cardiovasculares.